Dani Macaco regresa con un nuevo álbum, «Futuro Ancestral», ya disponible en plataformas digitales. Un álbum afilado, consciente e irónico, que bebe de las músicas de raíz del sur del mundo para reflexionar sobre el presente. Un disco que -como su propio título indica- mira hacia atrás para empujar hacia delante: La paradoja constante, el oxímoron.
En un contexto social saturado de egos, de ruido y de polarización, «Futuro Ancestral» emerge como una invitación a recuperar la empatía y lo colectivo. En las propias palabras del artista, «El canto de nuestros ancestros era coral, no individual. El coro es democrático, nunca desafina, sino que nos empodera, nos une y produce endorfinas. La voz coral es nuestro futuro ancestral».
Desde una mirada lúcida y combativa, Macaco denuncia con ritmo, poesía y sátira un mundo en el que «decir la barbaridad más inhumana está de moda» y donde «la empatía ya no se lleva, sino que se ahoga». Así, su recién publicado trabajo discográfico se presenta como un disco para bailar, pensar, soltar y gritar. «Futuro Ancestral» es un canto coral en tiempos donde parece que el debate y la capacidad de escuchar al de enfrente están en peligro de extinción. Una invocación al pasado para no olvidar hacia dónde vamos.

«Futuro Ancestral» es un cómputo de canciones orgánicas donde encontramos una gran variedad de géneros musicales, desde el afrobeat o la rumba flamenca hasta la chacarera, el merengue, la cumbia, la rumba catalana o el boogaloo. Sonidos del mundo atravesados por el spoken world y la slam poetry (rimas conscientes) con percusiones elaboradas a mano y sin programaciones.
Entre las influencias de este trabajo destacan proyectos musicales como el de Fela Kuti, Kae Tempest o Lola Flores, pero también estilos sonoros como las murgas, las chirigotas o los coros marineros, dando forma a un ritual profano hecho música: Madera, hongos, arco y flecha, fuego y baile. «Futuro Ancestral» nace de un periodo personal y colectivo convulso. «Uno de mis refugios ha sido el humor; por supuesto, también crear, escribir, cantar, la naturaleza», confiesa el artista, que cita a Groucho Marx, Monty Python o Buenafuente como faros de lucidez en tiempos de caos.







