El sábado 6 de septiembre, Sevilla fue testigo de una noche que quedará grabada en la memoria de todos los asistentes. Más de 20.000 personas llenaron el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo para recibir a Arde Bogotá, que cerró la etapa Eclipse de su gira Cowboys de la A3 dentro del ciclo POP CAAC. La combinación de fuerza, emoción y público entregado convirtió la velada en un espectáculo inolvidable.
La expectación era máxima: desde hace meses no había billetes para este concierto, y el ambiente se palpaba incluso horas antes de la apertura de puertas. Puntuales y con una energía desbordante, Antonio García, Dani Sánchez, Pepe Esteban y José Ángel Mercader subieron al escenario pasados unos minutos de las 22:00 para arrancar con “Veneno”. Desde el primer acorde, las luces iluminaron a un público que saltaba al unísono, coreando cada palabra, mientras la batería y las guitarras hacían vibrar cada rincón del CAAC. La electricidad en el aire era palpable: una banda en su mejor momento y un público completamente entregado.
El repertorio fue un viaje que combinó intensidad y sensibilidad. Himnos como “Abajo”, “Nuestros pecados” y “Qué vida tan dura” se alternaron con momentos íntimos, pero fue “Exoplaneta” el que detuvo el tiempo por unos minutos. La iluminación bajó a un azul profundo, las guitarras suavizaron su fuerza y la voz de Antonio García llenó la sala con una vulnerabilidad casi tangible. Miles de asistentes cerraron los ojos, cantaron juntos y dejaron que la música los envolviera: un instante de comunión absoluta entre banda y público.

Otro de los momentos más intensos llegó con “Sin vergüenza”, originalmente interpretada por Don Dani Fernández. Arde Bogotá hizo suyo el tema, imprimiéndole su propio estilo y potencia, mientras el público coreaba cada verso con una energía desbordante. Antonio García se acercó al borde del escenario y, durante los coros, cientos de manos se levantaron al unísono, creando un vínculo directo y electrizante entre la banda y la multitud. Fue un instante de liberación colectiva, donde la complicidad entre músicos y fans alcanzó su punto máximo.
La trayectoria de Arde Bogotá se hizo sentir en cada gesto y cada nota. Desde sus comienzos en Cartagena hasta llenar el CAAC, pasando por su última visita a Sevilla en el Festival Interestelar 2024, la banda ha demostrado que cada paso ha sido un escalón hacia la consolidación definitiva en el rock nacional.
Entre los asistentes, se percibía la emoción de vivir algo único. Lucía, de Almería, 22 años, comentaba entre aplausos:
“Es increíble estar aquí. Arde Bogotá transmite algo que pocas bandas consiguen. Cada canción te hace sentir parte de algo más grande. Para mí, son la banda del momento.”
A su lado, Manuel, sevillano de 24 años, añadía:
“He seguido a Arde Bogotá desde sus primeros conciertos en salas pequeñas. Verlos llenar el CAAC es emocionante. La fuerza de la banda, la voz de Antonio… transmiten de verdad. Es imposible no entregarse.”

Tras el clímax emocional, la recta final devolvió toda la potencia con “Torre Picasso”, “Cowboys de la A3”, “Virtud y castigo”, volviendo a encontrar momentos de pura sensibilidad gracias a “copilotos” o “Salvación”, que fueron interpretadas junto a una orquesta de cuerda, lo que prolongó esa sensación de magia, transformando el CAAC en un espacio donde la electricidad del rock y la sensibilidad se entrelazaban.
El espectáculo llegaría al final con un cierre explosivo con “Antiaéreo”, “Los perros” y “Cariño”. Dos horas después, el público salió exhausto pero radiante, consciente de haber presenciado un momento histórico.
La fiesta continuó con el DJ set de Juancasupersub (batería de la mítica Supersubmarina), que prolongó la celebración hasta bien entrada la madrugada, demostrando que el POP CAAC es un espacio donde la música en directo y el arte contemporáneo se encuentran de forma perfecta.
Más allá de la música, lo que definió la noche fue la emoción compartida: Sevilla entregada, una banda agradecida que recordó sus humildes inicios, y miles de fans confirmando que Arde Bogotá es la banda del momento, capaz de emocionar, hacer saltar y cantar a miles en cada concierto. Y esto solo es el inicio: tras ellos desfilarán artistas como Amaral, Trueno o Loquillo, prometiendo nuevas noches inolvidables en el POP CAAC.